Capilla de Chambéry

1453. La hija de Godofredo II vendió la Sábana a la Casa de Saboya.

1506. La Sábana pasó a la capilla del castillo de Chambéry. En ese momento, la Iglesia ya había permitido que se venerara en público la Sábana como reliquia póstuma, que tuviera su día conmemorativo y que se le celebraran misas. Concurría una gran cantidad de peregrinos.

1532. En un incendio ocurrido el 4 de diciembre en la Santa Capilla de Chambéry, la Sábana sufrió grandes daños. Quedaron plasmadas manchas y llamativos agujeros provocados por el incendio y marcas del agua que se utilizó para combatirlo.

Durante las guerras entre Francisco I y Carlos V, en las que también participa el duque Carlos II de Saboya, se hacía mención a diversos lugares en los que se conservó la Sábana antes de volver a Chambéry.

Catedral de Turín